El mejor plan de verano es pasar el día entero en la playa. Pero ir todos los días al chiringuito o acabar comiendo un bocadillo no es lo mejor. Aquí van algunas recetas saludables y fáciles de llevar para disfrutar de una jornada de sol y baños en el mar:

Macedonia de frutas: la fruta es un alimento que aporta muchas vitaminas, no engorda y contiene mucha agua para nuestro cuerpo. Combina las frutas que más te gusten y llévalas bien picadas para poderlas comer fácilmente con los dedos. La sandía es perfecta porque aporta líquidos y grandes dosis de betacarotenos beneficiosos para la piel.

Ensaladas: son sanas, refrescantes y ligeras. Combina las verduras y hortalizas con proteínas como el atún o el huevo.

Ensaladas frías de pasta o arroz: admiten muchos ingredientes, son contundentes y muy sanas a la par que deliciosas.

Cremas frías como gazpacho, crema de melón, etc. Son muy fáciles de tomar y muy saludables. Para la crema de melón bate 600 gr de melón con 30 gr de cebolla, un calabacín, un huevo cocido, un chorro de aceite y una pizca de sal y de pimienta.

Como alternativa a los bocadillos están las empanadas, las quiches, los sándwiches o la clásica tortilla de patata. No precisan de cubiertos ni de grandes preparaciones.

Un truco clave es desayunar fuerte antes de ir a la playa. Y por supuesto, son imprescindibles los líquidos ya que el exceso de calor hace que nuestro cuerpo aumente su temperatura y con ello la sudoración. Las bebidas más recomendadas son las isotónicas o los zumos, y por supuesto el agua.

Comer y beber es imprescindible para disfrutar de un día de playa sin imprevistos y con la única preocupación de relajarnos, pasear por la orilla del mar y lucir palmito con bañadores y bikinis de Red Point

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